La entrada de tu farmacia debe invitar a entrar, crear una sensación agradable.
La fachada aporta estilo, presencia, el escaparate proyecta una imagen. Ambos elementos deben guardar el equilibrio necesario. Para conseguir una sensación agradable de armonía.
Una vez que entendemos el espacio comercial como un espacio en el que todo el espacio es aprovechable, veremos la entrada como un lugar importante, pues bien entendida y gestionada, ayudará a que nuestros potenciales clientes entren en nuestra farmacia
Una entrada oscura, demasiado estrecha, o bloqueada por algunos adornos u otros objetos, podría ser una barrera psicológica para el consumidor, mientras que una entrada iluminada, amplia y de fácil acceso, podría ser un estímulo para que decida ingresar al local.
¿Te has parado a pensar en la entrada de tu farmacia como algo más que ” la puerta ” ?
Desde que entramos en una farmacia, hasta que nos “ubicamos” dentro, necesitamos un tiempo de adaptación, un lugar que nos permita ese momento de transición. Para ello necesitamos un espacio agradable, que nos de la bienvenida, nos relaje … para que nuestra visita a la farmacia sea tranquila y efectiva.
La entrada vende… vende una sensación. Crea una IMAGEN de tu farmacia en ese espacio, la imagen que quieres que tu cliente complemente con la que ya le has transmitido a través de la fachada y el escaparate.
¿Cómo lograrlo?
Al pensar en el diseño de tu farmacia, piensa tanto en el exterior como en el interior, y no olvides que la entrada es el elemento que une esos dos espacios.
Busca amplitud y luz con el diseño exterior, potenciando los escaparates, con una puerta cómoda (automática si es posible) y una rotulación que no sea estridente, que sea agradable. La cruz de leds por supuesto, donde más visibilidad genere.
En el interior juega con un mobiliario de farmacia sencillo pero elegante, que deje ver la farmacia en su conjunto, que “atrape” al consumidor, que le venda una vocación de servicio, que simplemente al entrar sienta que se le va a tratar bien, sin bombardearle con productos o servicios.
Muy importante, la visibilidad de las categorías y servicios principales de tu farmacia. Esta debe ser clara desde la entrada.
Cada farmacia tiene unas categorías y servicios principales en función de muchos factores, ubicación, edad de la población, especialización de los trabajadores, reclamo de los clientes….
Suelen ser 3 o 4, no más, por ello, desde la entrada a la farmacia el cliente debe ser capaz de ver e identificarlas sin ningún problema,... botiquín, infantil, dermocosmética....
Como realizar esto… no os perdáis el próximo post, lo analizaremos con detenimiento.
Recuerda siempre:
La fachada y puerta del negocio debe facilitar y estimular la entrada del consumidor al establecimiento, así como proyectar y reforzar una IMAGEN completa de lo que queremos transmitir a nuestros clientes.